El artista dominicano de las artes plásticas José Perdomo, con una trayectoria de más de 50 años dedicados a la pintura, que nació en Santo Domingo, República Dominicana, murió este lunes 8 de abril, a los 81 años.
Su vida artística estuvo cargada de un talento que despertó desde sus primeros años, manifestándose en ilustraciones escolares con las que destacaba. Su formación se fundamentó en la Escuela Nacional de Bellas Artes y en los talleres de Paul Giudicelli y Gilberto Hernández Ortega. Viajó a Estados Unidos una vez iniciada la Revolución de Abril y regresó en 1966 para realizar su primera exposición individual en el Palacio Nacional de Bellas Artes. Además, estudió con los maestros Luis Camnitzer y Robert Motherwell, tuvo la oportunidad de vivir en Perú y Brasil.
Reconocidas fueron sus exposiciones en diferentes galerías de arte dominicanas, así como en Bélgica, Alemania, Venezuela, Panamá, Guadalupe, Estados Unidos, México, Perú, Puerto Rico, Brasil y Canadá.
José Perdomo fue ganador del Premio de Pintura de la Cuarta Bienal Internacional de Pintura de Cuenca, Ecuador, otorgado en 1994, así como el primer premio de Pintura de la Vigésima Bienal Nacional de Artes Visuales de la República Dominicana en 1996.
Su línea de artes plásticas se fundamentó en un trazado singularizado con figuras humanas de colores fuertes con gran estructura formal de la estética y niveles de expresión visual. Manifestó un gran amor por la biodiversidad, pintando flores, peces, aves, mariposas y figuras taínas entre otras.
El pintor fallecido fue despedido en el Jardín Memorial por todos sus familiares, amigos y colegas del arte en general. Nos queda su legado perdurable, de aquel que, con su incansable creatividad y pasión artística, pudo recoger en sus lienzos, la mágica obra de Dios en la naturaleza.