El 1 de mayo, el Día Internacional del Trabajador, se conmemoró con diversas manifestaciones en América Latina, donde trabajadores de varios países salieron a las calles para exigir mejoras laborales y protestar contra las políticas económicas actuales, y algunos líderes prometieron mejoras y nuevas leyes.
En Buenos Aires, la Confederación General del Trabajo (CGT) lideró una gran movilización contra el “ajuste brutal” del gobierno de Javier Milei. Bajo el lema “La Patria no se vende”, los trabajadores se congregaron en el “Canto al Trabajo”, una escultura representativa del esfuerzo laboral, para denunciar los recortes en obras públicas, transporte, educación y programas sociales, así como la intervención en las negociaciones salariales. “Todos los derechos sociales, laborales, sindicales y profesionales se encuentran amenazados”, afirmó la CGT en un comunicado.
Lula promete más conquistas
En São Paulo, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, prometió “más conquistas de derechos” para los trabajadores y apoyó a los pequeños y medianos emprendedores.
Antes de comenzar el acto, Lula firmó un decreto que amplía la exención del pago de impuesto de renta para quien cobra hasta 2.842 reales (unos 547 dólares o 512 euros) y prometió ampliar ese umbral para incluir los salarios de hasta 5.000 reales (cerca de 962 dólares o 900 euros).
En México, el presidente Andrés Manuel López Obrador lanzó el nuevo Fondo de Pensiones del Bienestar, prometiendo pensiones dignas para la primera generación de jubilados.
Con la creación de este fondo, el Gobierno mexicano busca asegurar una tasa de reemplazo del 100 % para los trabajadores formales jubilados desde 1997..
En Bogotá y otras ciudades principales de Colombia, los trabajadores se manifestaron en apoyo a las reformas laborales y pensionales propuestas por el Gobierno de Gustavo Petro. Un sonriente Petro llegó a la manifestación rodeado por un ejército de guardaespaldas que se esforzaban por abrirle paso en medio de la multitud.
Maduro y la oposición discrepan sobre derechos
Desde Caracas, el presidente Nicolás Maduro celebró el día con promesas de mejorar la economía y los derechos laborales. “¡Feliz día, pueblo trabajador! Tenemos razones de sobra para celebrar, somos un río crecido de fe, conciencia, constancia y amor patrio. Hoy, el país se sostiene sobre los valor”.
Pero dirigentes opositores de Venezuela acusaron este miércoles al Gobierno de Maduro de “destruir” derechos laborales cuya recuperación -señalaron- pasa por un “cambio político” en el país, que se prepara para celebrar las presidenciales el próximo 28 de julio.