Luis Ramón Cabral solicitó al presidente Luis Abinader que vaya en su auxilio a través de los programas de asistencias sociales del Gobierno, ya que asegura que el siniestro ha sido “traumático y doloroso para su familia”
En llamas y reducidas a cenizas vio una familia de escasos recursos perder su casa, mientras el fuego consumía sus pertenecías y toda la infraestructura de su casa construida en madera y zinc, en la sección Maipáez, en el municipio de San Gregorio de Nigua, San Cristóbal.
La familia compuesta por dos adultos, tres hijos y tres nietos hoy quedan al intemperie.
Es por eso que el padre Luis Ramón Cabral solicitó al presidente Luis Abinader que vaya en su auxilio a través de los programas de asistencias sociales del Gobierno, ya que asegura que el siniestro ha sido “traumático y doloroso para su familia”, principalmente para los más pequeños de la casa.
Narró con voz afligida como los nietos le preguntan “¿Y ahora donde vamos a comer?”.
El hombre reiteró la urgente necesidad de una “mano amiga”, ya que él y su esposa están desempleados y las “chiripas” que hace no es suficiente para llevar el sustento a su familia. Mientras tanto, también viven de la caridad de algunos familiares y vecinos.
Pese a que están arrimados en la sala de una de sus hijas que vive en la misma comunidad, se afianza con la frase “Dios proveerá”, mientras narraba estar agredido con Dios porque en el momento del incendio no se encontraba nadie en la casa.
Los niños se encontraban en la escuela, lo que ha permitido que conservaran sus útiles escolares para continuar estudiando.
“No tenemos con que alimentarnos. El Gobierno que nos ayude a construir nuestra humilde vivienda”, exclamó el hombre.
Cabral contó que tenía planes de poner un “ventorrillo”, con el dinero de la liquidación de su último trabajo, donde desempeñó como seguridad, pero que el fuego “mató sus esperanzas”, al perder también los documentos que tenía listo para solicitar una pensión al Estado.
Los afectados insistieron en que cualquier ayuda es bienvenida, ya que en este momento están carentes de las elementos básicos como ropa, comida y otros utensilio de primera mano.
Para cualquier ayuda se puede llamar a los teléfonos: 809-453-3351 y 829-977-8242.